TransCanada inicia arbitraje en virtud del TLCAN contra Estados Unidos por rechazo del oleoducto Keystone XL*
El 6 de enero de 2016, TransCanada inició un arbitraje contra los Estados Unidos por “dilatar la aprobación de manera irrazonable” del propuesto oleoducto Keystone XL y finalmente denegar dicha aprobación, en noviembre de 2015. La solicitud de la empresa requería un Permiso Presidencial. Alegando que Estados Unidos incumplió sus compromisos de no discriminación, expropiación y trato justo y equitativo asumidos en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la empresa canadiense solicitó compensación por daños por más de US$15 mil millones.
El gasoducto Keystone XL, que transportaría petróleo crudo desde la provincia canadiense de Alberta a los puertos estadounidenses del Golfo de México, se tornó un asunto político contencioso en los Estados Unidos. Los ambientalistas criticaron la alta intensidad de liberación de carbono a raíz de la extracción de petróleo de las arenas bituminosas de Alberta, y alegaron que el oleoducto iría en contra de los esfuerzos de dicho país para reducir su dependencia en los combustibles fósiles. Mientras tanto, los legisladores Republicanos y varios Estados de los Estados Unidos apoyaron el proyecto.
En su Notificación de Intención, TransCanada subrayó que la revisión de la solicitud se prolongó más de lo común para un proyecto tal como el del oleoducto. La Administración de Obama admitió la demora porque el proyecto se había politizado en Estados Unidos. En una declaración después del rechazo de la solicitud el 6 de noviembre de 2015, el Presidente Obama explicó: “América ahora es líder mundial en cuanto a la toma de acciones serias para combatir el cambio climático. Y francamente, aprobar este proyecto implicaría socavar este liderazgo mundial”.
El mismo día que inició el arbitraje, TransCanada también entabló una demanda en contra de las autoridades federales de los Estados Unidos ante un tribunal estadounidense, reclamando que el rechazo de la solicitud por parte de Obama excedía los poderes constitucionales del Presidente y que faltaba la autorización del Congreso. Este caso de la corte estadounidense se desarrolla en paralelo al del TLCAN, cuya resolución se espera que tome varios años. Hasta la fecha, Estados Unidos nunca ha perdido una demanda entablada en virtud del TLCAN.
*El equipo editorial desea hacer un reconocimiento, agradeciendo mucho la contribución de Jacob Greenberg, Geneva International Fellow de la Facultad de Derecho de la Universidad de Michigan y pasante del Programa de Inversiones para el Desarrollo Sostenible del IISD.